El 24 de octubre de 2006 publicaba Taylor Swift, aún con dieciséis años, su primer álbum, arrancando una carrera que se dispararía con cada entrega siguiente. Sin embargo no es oro todo lo que brilla. Las promesas que te hacen cuando comienzas son infinitas, pero la realidad se ciñe a lo que tú, inocente, has firmado. ¿Cuántos creadores –pintores, escritores- se han visto desposeídos de su obra y se han arrepentido por haber firmado la letra pequeña de una cláusula? En lo que creas va parte de tu vida y de tus entrañas.
De modo que Taylor ha asistido a la venta y reventa –al mercadeo multimillonario- de sus canciones anteriores a 2017 por parte de terceros y cuartos, sin poder recuperarlas legalmente. ¿Y cómo ha decidido vengarse? Pues regrabando los seis álbumes implicados. Y ha empezado por el segundo, “Fearless”, porque seguramente sus canciones –publicadas en 2008, cuando aún contaba con dieciocho años- son las que mejor reflejan los sentimientos de la conciencia sentimental de su adolescencia. La amistad, el corazón horadado por un amor irremisible, o los sueños de futuro: la experiencia turbulenta de esa edad en todo su -y más inspirado- esplendor. [Más…]