Para medir si una figura histórica interesa a alguien más que a los especialistas nada mejor que comprobar si ha ocupado alguna de los centelleantes teatros de Broadway (o sus alrededores). El sui generis y angosto lenguaje de los musicales americanos ha parido desde montajes dedicados a Evita Perón hasta Jesucristo. Pero una vez cada diez años te sorprenden con un trabajo centrado en un personaje que te despierta simpatía e interés, como Fela Anikulapo Kuti.
El coreógrafo Bill T. Jones ha estrenado un musical titulado “Fela!”, basado en el libreto que escribieron sobre el mito nigeriano el propio Jones y Bill Lewis. En la obra hay música de Kuti, claro, interpretada en directo por el colectivo de afrobeat neoyorquino Antibalas. La verdad es que ya en la puesta en escena del músico y su banda, Nigeria 70, los bailes jugaban un papel importante; inevitable con ese poderío rítmico.
“Fela!” está en cartel hasta el próximo 21 de septiembre en el teatro 37 Arts. Por si alguien tiene dudas, es tan improbable que alguno de los empresarios que programan musicales en España lo traigan a este lado del charco como que lluevan piedras.En cualquier caso puedes resucitar a Fela pinchando aquí.
El «off-Broadway» me queda un poco a desmano, pero hay ganas. Sobretodo sabiendo que andan metidos en el ajo Antibalas… El tema «Beaten Metal» que abría «Security» (2007) era puro Kuti instrumentalizado.
En fin: habrá que conformarse con exprimirle el jugo a la edición de su «Lagos Baby» en directo. ojalá lloviesen pedruscos, tú.
Corren buenos tiempos mediáticos para la música nigeriana. Además de los recopilatorios del sello Strut (imprescindible el doble CD con DVD de la serie Nigeria 70) y de Soundway (tres pepinazos: «Nigeria Special!», «Nigeria Disco Funk» y «Nigeria Rock»), la revista Mojo acaba de publicar en su número de septiembre los discos más recomendables del highlife, una mezcla polirrítmica de rumba (que los nigerianos importaron del Congo), afrosoul y música de orquesta; menos agresivo que el afrobeat pero igual de exportable.
Cierto. Y mucho ojito a «Highlife Time», una recopilación de música de baile de Ghana y Nigeria que se acaba de sacar de la manga la gente de Vampisoul y que es de lo más increíble que me he echado a los oídos en tiempo.
En cuanto a las ediciones de Soundway y Strut, es para ponerle una vela a San Martín de Porres o peregrinar de rodillas a la Moreneta. ¡Por Usain Bolt, que bueno!
Por curiosidad, César. ¿el recopilatorio de Strut al que haces referencia es el primero, el que sacaron hace años, o ha habido alguno entre ese y el de este año?.
Saludos.
Me refería al primero, «The Definitive Story Of Funky Lagos», aunque el último («Lagos Jump») es igual de bueno. El diseño de la carpeta del primero es muy chulo y en ambos la información es más que abundante. Adquisiciones obligadas para fans, por ejemplo, de «Remain In Light» (Talking Heads)