Visto el panorama, es lógico que desde Captured Tracks se intente reavivar la llama de la formación canadiense Cosmetics. ¿Motivos? Tan solo basta con darse una pequeña vuelta por los sonidos recuperados del ep “Olympia” para establecer comparaciones con sus amigos Soft Metals, además de Cold Cave o Chromatics. Estamos hablando de pop noctámbulo y evocador que se construye desde diferentes sonidos procedentes de sintetizadores que tratan de reclamar el imaginario de una época perdida en la memoria y pasado recuperado desde estéticas pretéritas. Dentro de las composiciones de “Olympia” tenemos que precisar que muchas de ellas son nuevas aproximaciones de los primeros singles que editaron en 2010 como son “Soft Skin/Black Leather Gloves” o “Sleepwalking”, que se incluyen además en la versión “Plus” de este ep que contiene la novedad de “Heartbeat” como nuevo impulso a la trayectoria del trío compuesto por Nic M, Aja Emma y Felix Felix. Debo reconocer que siento cierta debilidad por algunas de las tomas pretéritas de estas canciones, preservando el encanto al desenfocar el objetivo para no crear una composición que estuviera mimetizada simétricamente con el pasado new/coldwave. No es la primera vez que encontramos estas remasterizaciones/renovaciones (los anteriormente citados Chromatics también lo hicieron), lo importante es que consiguen seguir serpenteando por esas línea de elegancia kitsch de universo cercano al thriller erótico y la melancolía hedonista. Además consiguen brillar en construcciones de monotonía disco como “Honey Honey” (participaron en discos del veterano Black Devil Disco Club) y en la novedad de “Heartbeat” deciden de tomarse el sentimiento de cabaret psychobilly de Dirty Beaches para fundirlo con John Foxx en una divertida y atrayente estampa. Recientemente, han colgado en su bandcamp una versión de Beat Happening (“Black Candy”) que me invita a reflexionar acerca del atractivo de formaciones que desde una especie de toque ilustrado y melómano son capaces de aportar un toque naive venenoso que los diferencia con mayor precisión (salvando las distancias obviamente, la formación de Calvin Johnson es toda una institución generacional). Una pugna de intangibles muy personal debo reconocer. Por último, resaltar la reactivación de una formación a partir de esta reedición y una renovada estrategia de comunicación en diferentes plataformas de las redes sociales, una gira, etc. Mantienen el potencial, ahora falta que no lo lastren.