Continuación de la entrevista con Arturo Lanz.
¿Y qué público teníais entonces? ¿Quién iba a vuestros conciertos?
“En los dos primeros conciertos que dimos aún estaban los habituales del Rock-Ola. El primero fue en una tienda de discos y el segundo en El Jardín. Nuestro repertorio al principio era más suave, por eso nos hacían algo de caso. “Moscú está helado” era la canción que mejor representaba nuestro sonido en aquellos primeros meses. Pero enseguida nos radicalizamos. Y ya en el tercer concierto que dimos, el de Rock-Ola, tocamos nuestro repertorio más bestia. Entonces vino el rechazo generalizado y a partir de ahí nos dimos cuenta que ya con “Héroe del trabajo / El acero del partido” (su primer y mítico disco, publicado en 1982) tendríamos que buscarnos la vida fuera.” Sigue leyendo Esplendor Geométrico (y II)