No es sencillo acercarse a la obra de Richard Youngs para alguien ajeno a ella, ya sea en nombre propio o en infinidad de proyectos y colaboraciones con las que ya nos estaríamos moviendo en unos números que asustarían de entrada. Centrándonos exclusivamente en su obra en solitario, estos terrenos que ha ido abarcando desde la composición minimalista y de vanguardia de un disco de debut como “Advent” (1990) han ido dejando paso a una colección memorable en torno al folk inglés conducido de una manera del mismo modo arriesgada y poco dada a la pura estampa campestre repleta de elementos melódicos que nos evocan de manera tradicional este género. Su modus operandi tiene siempre algo malicioso y retorcido, sumado a la peculiaridad de su voz nasal y aguda siempre cerca de quebrarse, al estilo de Robert Wyatt por ejemplo, mucho más cercana en este punto a las primeras aventuras de Will Oldham como Palace aunque sin aquellas narraciones y temáticas tan terminales. Sigue leyendo Richard Youngs