Demasiado perfecto. No puede ser real. O tal vez, muy de vez en cuando, sí lo es. Pasó con “The Trinity Session” de Cowboy Junkies y en menor medida con “Shadowland” de k.d. lang casi al mismo tiempo. Y con pasajes de Low, Lambchop, Mary Gauthier o Dayna Kurtz. Hacía sin embargo muchísimo tiempo que no escuchaba un álbum entero de americana así, tan inmerso en su concepto de soledad noctámbula como “Colfax” (El Cortez/Decor 2014) de The Delines, el grupo montado por Willy Vlautin y Sean Oldham de Richmond Fontaine -también están los inmensos teclados de Jenny Conlee-Drezos de The Decemberists dando empaque a la grabación- para lucimiento vocal de Amy Boone. Su voz penetra en lo más profundo de tu corazón, lo desgarra -si no está ya desgarrado- y te sume en un estado de abandono brutal. Sigue leyendo The Delines